El arenero es uno de los elementos más importantes para el bienestar de tu gato. El arenero es el lugar donde tu gato hace sus necesidades y las entierra después, siguiendo su instinto natural. El arenero debe ser cómodo, limpio y accesible para tu gato, para que se sienta a gusto y no busque otro lugar donde aliviarse.
Pero, ¿qué tipo de arenero es mejor para tu gato? ¿Un arenero abierto o un arenero cerrado? En este artículo te lo contamos todo, para que puedas elegir el arenero más adecuado para tu felino.
¿Qué es un arenero abierto y qué es un arenero cerrado?
Un arenero abierto es un recipiente sin tapa ni puerta, donde el gato puede entrar y salir con facilidad. Un arenero cerrado es un recipiente con tapa y puerta, donde el gato tiene más privacidad e intimidad.
Ambos tipos de areneros tienen sus ventajas e inconvenientes, tanto para el gato como para ti. A continuación te explicamos las características de cada uno.

Ventajas e inconvenientes de los areneros abiertos para gatos
Los areneros abiertos son los más comunes y económicos. Tienen las siguientes ventajas:
- Son más fáciles de limpiar: Al no tener tapa ni puerta, puedes acceder al interior del arenero con más comodidad y rapidez, lo que facilita la retirada de las heces y los orines y el cambio de la arena.
- Son más fáciles de usar: Al no tener tapa ni puerta, el gato puede entrar y salir del arenero con más facilidad y sin sentirse atrapado o asustado. Esto es especialmente importante si tu gato es anciano, tiene alguna discapacidad o es muy tímido o nervioso.
- Son más ventilados: Al no tener tapa ni puerta, el aire circula mejor por el interior del arenero, lo que evita la acumulación de humedad y malos olores. Esto es beneficioso para la salud del gato y para la tuya.
Sin embargo, los areneros abiertos también tienen algunos inconvenientes, como:
- Generan más suciedad: Al no tener tapa ni puerta, la arena puede salirse del arenero cuando el gato escarba o se mueve, lo que ensucia el suelo y los alrededores. También pueden salirse las heces o los orines si el gato no los entierra bien o si el borde del arenero es muy bajo.
- Generan más olores: Al no tener tapa ni puerta, los olores de las heces y los orines se dispersan por el ambiente, lo que puede ser molesto para ti y para tu gato. Esto puede solucionarse usando una arena de buena calidad, que absorba bien los líquidos y los olores, y limpiando el arenero con frecuencia.
- Generan menos privacidad: Al no tener tapa ni puerta, el gato puede sentirse expuesto o vigilado cuando usa el arenero, lo que puede generarle estrés o incomodidad. Esto puede solucionarse colocando el arenero en un lugar tranquilo y alejado del ruido y del paso de personas o animales.
Ventajas e inconvenientes de los areneros cerrados para gatos
Los areneros cerrados son una opción más moderna y sofisticada. Tienen las siguientes ventajas:
- Generan menos suciedad: Al tener tapa y puerta, la arena se queda dentro del arenero cuando el gato escarba o se mueve, lo que evita que se ensucie el suelo y los alrededores. También se quedan dentro las heces y los orines si el gato no los entierra bien o si el borde del arenero es muy bajo.
- Generan menos olores: Al tener tapa y puerta, los olores de las heces y los orines se quedan dentro del arenero, lo que reduce su impacto en el ambiente. Esto puede ser beneficioso para ti y para tu gato, siempre que limpies el arenero con frecuencia y uses una arena de buena calidad.
- Generan más privacidad: Al tener tapa y puerta, el gato tiene más intimidad y seguridad cuando usa el arenero, lo que puede hacerle sentir más cómodo y relajado. Esto es especialmente importante si tu gato es muy tímido o nervioso o si convive con otros gatos o animales.
Sin embargo, los areneros cerrados también tienen algunos inconvenientes, como:
- Son más difíciles de limpiar: Al tener tapa y puerta, debes abrir el arenero para acceder a su interior, lo que puede ser más incómodo y lento. Además, algunos areneros cerrados tienen una forma o un tamaño que dificultan la limpieza de los rincones o el cambio de la arena.
- Son más difíciles de usar: Al tener tapa y puerta, el gato debe entrar y salir del arenero por un espacio reducido, lo que puede ser más difícil o molesto. Esto es especialmente importante si tu gato es anciano, tiene alguna discapacidad o es muy grande o robusto.
- Son menos ventilados: Al tener tapa y puerta, el aire circula peor por el interior del arenero, lo que puede generar humedad y malos olores. Esto puede ser perjudicial para la salud del gato y para la tuya, especialmente si el arenero está en un lugar poco ventilado o si usas una arena de mala calidad.
Conclusión, ¿arenero abierto o cerrado para gatos?
Como has visto, no hay una respuesta definitiva a la pregunta de qué es mejor, arenero abierto o cerrado para gatos. El mejor tipo de arenero será aquel que se adapte a las necesidades y preferencias de tu gato y a las tuyas.
Por eso, te recomendamos que pruebes diferentes tipos de areneros hasta encontrar el que más te convenza y el que más le guste a tu gato. Así podrás garantizar su comodidad, su higiene y su salud.
¿Te ha gustado este artículo? ¿Te ha servido para resolver tus dudas sobre qué tipo de arenero elegir para tu gato? Si es así, compártelo con tus amigos. Y si quieres saber más sobre los areneros para gatos, lee nuestros consejos y reseñas sobre areneros para gatos, donde encontrarás los mejores productos y ofertas del mercado.